...Dividido entre impulsos fantasiosos a menudo estupendos y el interés por contar cosas concretas, esta historia de amor poco convencional marca el cambio exitoso de Eric-Emmanuel Schmitt de la escritura a la realización. Cuando el escritor describe un personaje que está harto, el cineasta graba un vaso que está lleno. Y todos tan contentos.
Vincent Guignebert
(...) Frot prodigiosa. Interpretando de verdad una verdadera historia imposible, rinde homenaje a todos los que intentan huir de las plumas kitsch y de las coreografías domésticas (más bien divertidas).
François Bégaudeau
... A través de este personaje luminoso, aéreo, pero enfrentado a lo cotidiano, el escritor rinde un bello homenaje al poder de las palabras y a la literatura. « La belleza salvará al mundo » decía Dostovieski. Eric-Emmanuel Schmitt expresa la misma idea pero, de un ligero gesto, la envuelve de buen humor y gracia.
F.T.
... Odette Toutlemonde es en realidad un hermoso homenaje al trabajo de lector. La película va a ser, en ese sentido, la oportunidad de plasmar en la gran pantalla los « transportes » (físicos e intelectuales) del lector apasionado pero también de crear lo que rara vez sucede en « la vida, la verdadera », un « encuentro » entre un escritor y su lectora, entre un hombre y una mujer, entre un pesimista y una optimista, entre dos imaginarios diametralmente opuestos que van poco a poco a sentirse atraídos y a amarse.
Muy pronto, la energía, el encanto y la sonrisa de Catherine Frot cantando a Joséphine Baker hacen que tengamos ganas de saltar a la pista de baile. La bella música de Nicola Piovani encuadra la película con ternura y parece que Odette y su universo brillante ilustran a la perfección el proverbio de Dany Boon en la última pelicula de Leconte : el buen humor, ¡El principio de la felicidad !
Laetitia Heurteau
...La primera película del autor dramático Eric-Emmanuel Schmitt , es una fábula sobre la felicidad.... El realizador introduce en este cuento bastante fantasía para desmarcarse del resto : las apariciones recurrentes de Jesús, los vuelos de Odette planeando literalmente cuando es feliz, su humor involuntario, el retablo exquisito de su entorno ( un hijo gay y alegre, una hija poco agraciada aquejada de una pubertad galopante, vecinos que participan en orgías) y sobre todo la simpatía y el encanto de su actriz principal , Catherine Frot. Le otorga a esta bella persona simplicidad, tolerancia y bondad..
¿Odette ? Le va a gustar a todo el mundo.
Virginie Gaucher
Una mirada llena de fantasía sobre como un escritor de éxito o una canción popular pueden alegrar una vida mustia, "Odette Toulemonde" es un delicioso momento de realismo mágico que asesta un golpe cinematográfico en las narices de la intelectualidad. Catherine Frot interpreta maravillosamente el papel de una activa viuda cuya actitud alegre se sostiene con su entusiasmo ilimitado hacia los libros de un escritor parisino. El urbanita sofisticado y la admiradora provinciana belga se conocen e iluminan sus rspectivas vudas cuando todo les separa. Este éxito local, escrito por el célebre dramaturgo Eric-Emmanuel Schmitt, cautiva a los espectadores , los embelesa, quizás más.
Odette, que trabaja en unos grandes almacenes de las afueras de Bruselas, no tiene ningún motivo objetivamente para ser feliz salvo su hijo de 19 años, Rudy (Fabrice Murgia), peluquero homosexual y equilibrado. Su hija mayor Sue Helen (Nina Drecq), esta en paro. Los dos hijos hijos de Odette todavía viven en casa, así como sus novios.
Cuando no está en el departamento de cosméticos de los grandes almacenes, Odette completa sus ingresos cosiendo hasta tarde plumas y lentejuelas.Y sin embargo, rebosa siempre energia y vitalidad, y actúa con sentido común, sin caer en sensiblerias.
Al comenzar la cinta, Odette, rozando la cincuentena, está exultante. Sale pronto de trabajar, se arregla, y coge el autobús que la lleva a Bruselas. Allí, Balthazar Balsan (Albert Dupontel, una interpretación notable), el autor que admira en la distancia, firma sus libros.
Cuando le toca el turno, Odette, muda de emoción, le pide una dedicatoria errónea. Ruddy, que siempre la anima, incita a su madre a escribir una carta a Balsan manifestándole toda su admiración. Así, Odette expresa su agradecimiento , explicándole a Balsan, sin pretensiones ni florituras, como sus libros le habían ayudado a vivir.
Absorta en la escritura, Odette se entusiasma de tal manera que se eleva literalmente de su asiento en el autobus. A lo largo de toda la película , cada vez que Odette se emociona, despega, se eleva en el aire y vuela como si de una Mary Poppins contemporánea sin paraguas mágico se tratese.
En una situación donde lo asaltan las dudas, Balsan lee la carta. Y en un giro tan encantador como improbable decide ir a Bélgica en busca de su admiradora.
Odette rebosa sentido común, pero es todo lo contrario de un intelectual. Su apartamento es un monumento al mal gusto. Balsan buscaba un cambio de ritmo de vida radical y lo encuentra.
Destacado dramaturgo y novelista, Schmitt, cuya novela « El Señor Ibrahim y las Flores del Corán » fue llevada a la pantalla y protagonizada por Omar Sharif en 2003, emplea a menudo el punto de vista de un ángel, mirando con benevolencia a sus personajes luchando por sobrevivir.
Canturreando algunas canciones de la banda sonora y con el paso ligero, Odette encarna, sin complacencia, al ejercito silencioso de vendedoras, cajeras y porteras de sueños simples pero auténticos.
Amenizada con canciones francesas interpretadas por Josephine Baker, la banda sonora compuesta por Nicola Piovani es un elemento central de la trama, que se mezcla de manera admirable con las diversas escenas de la película. El apellido imaginario 'Toulemonde', que se puede traducir como « Toelmundo », representa a las gentes simples, al pueblo llano.
Lisa Nesselson
